Las mejores ciudades de Armenia para incluir en tu itinerario

Judith Bello | Mon 25 Jan 2021

Armenia es un destino con una historia digna de mencionar. El país está salpicado de lugares y monumentos antiguos que merecen ser visitados. Armenia cuenta también con una rica cultura, una gran gastronomía y unos habitantes muy amables que harán más fácil su experiencia de viaje. Para un viajero entusiasta no hay mejor escapada que sumergirse en estas atracciones con el telón de fondo de los impresionantes paisajes naturales de Armenia.

Si estás planeando visitar este increíble país, a continuación mostraremos las principales ciudades de Armenia, cada una de las cuales ofrece un sinfín de atracciones que te mantendrán entretenido durante días. 

Ereván

Ereván es la capital de Armenia. Si es la primera vez que visitas el país, te recomendamos que empieces tu visita por aquí. Ereván es una de las ciudades más antiguas del mundo, cuyo origen se remonta al siglo VII. Es una ciudad muy atractiva y con muchas cosas que visitar.

La Plaza de la República es un lugar famoso con elegantes edificios construidos con ladrillos de color rosa, por eso Ereván recibe el apodo de la Ciudad Rosa. Aquí podrás conocer la larga historia del país en el Museo de Historia de Armenia o pasar el rato en muchos cafés y restaurantes de la zona. La Plaza de la República es especialmente fascinante por la noche con su espectáculo de fuentes danzantes.

Una visita al Museo del Genocidio es imprescindible si tienes curiosidad por conocer el doloroso pasado de Armenia, ya que destaca la masacre llevada a cabo por el Imperio Otomano durante su invasión. Incluso se puede rendir homenaje a las víctimas en el Memorial del Genocidio situado en las cercanías.

Otro punto de interés para los viajeros es la Cascada, un enorme tramo de escaleras con diferentes monumentos arquitectónicos en el centro. Si aún te quedan ganas, puedes seguir subiendo hasta la cima y obtener unas vistas fascinantes de la ciudad desde las alturas.

Gyumri

En el noroeste de Armenia se encuentra Gyumri, una ciudad que conserva algunas de las mejores arquitecturas armenias. Un carácter notable aquí es el tono ennegrecido de sus edificios y monumentos acentuado con el color naranja-dorado. La razón de esta tonalidad es porque los edificios están construidos con toba volcánica.

La ciudad era realmente hermosa años atrás, pero un terremoto la dejó destrozada. Lo que se ve hoy es la reconstrucción de la ciudad de Gyumri, conservando todo lo que se ha podido de la ciudad anterior al terremoto.

La plaza Vartanants es el mejor lugar para empezar la visita. Tiene muchos edificios antiguos dignos de admiración, como la Iglesia del Santo Salvador, la Catedral de la Santa Madre de Dios y el Ayuntamiento.

A continuación, puedes visitar la antigua fortaleza negra conocida como Sev Berd, construida por el Imperio ruso. Hoy en día es un reconocido lugar cultural donde se celebran frecuentemente conciertos y diferentes actos sociales.

Otra de las atracciones de Gyumri es la estatua de la Madre Armenia que se construyó después de la Segunda Guerra Mundial para significar la victoria de la Unión Soviética. Si desciendes por las escaleras que parten de la base de la estatua, llegarás a un jardín que tiene muchos bloques de piedra con los nombres de las capitales de la Unión Soviética inscritos en ellos.

Vanadzor

Vanadzor es una pintoresca ciudad del norte de Armenia que cuenta con un refugio natural perfecto para quien quiera escapar de la muchedumbre de Ereván. Vanadzor es de un atractivo innegable y, aparte, cuenta con una exuberante vegetación que domina sus alrededores así que, si quieres curarte, relajarte y recargar las pilas, no busques más.

Vanadzor también tiene su propia versión de un espacio público como el de otras ciudades, conocido como la plaza Hayk, en la que se encuentran el Ayuntamiento y otros establecimientos. También podrás observar monumentos soviéticos y fuentes danzantes en la zona.

El Museo de Bellas Artes alberga más de 1.700 obras de arte que incluyen esculturas, pinturas y otras formas de arte decorativo que retratan la vida y la historia local armenia. Otros lugares de interés son la Iglesia Ortodoxa Rusa, el Museo Geológico Lori-Pambak y el Jardín Botánico de Vanadzor.

El mercado local de la ciudad, Shuka, es un buen lugar para comprar productos locales, como frutos secos y aperitivos. Si te gustan las antigüedades, visita la tienda de antigüedades de Vanadzor, fundada en la década de 1980.

Además de estas atracciones, Vanadzor es también un lugar ideal para practicar rafting, senderismo, montañismo y otras actividades relacionadas con la naturaleza. Asegúrate de organizarlas con antelación a través de un guía turístico.

Goris

Enclavada en el sur de Armenia, Goris es un lugar que se denomina como ciudad y pueblo de forma sinónima. Cuando estés en Goris, te recomendamos también que recorras los pueblos de los alrededores y que experimentes el encanto del sur de Armenia.

La iglesia de San Gregorio el Iluminador, diseñada por un arquitecto italo-armenio, es una atracción muy recomendable. Luego puedes visitar el Museo Geológico, que alberga una amplia colección de artefactos de diferentes épocas.

Las Cuevas Medievales de Goris son un buen lugar para observar los orígenes del país. Para llegar al lugar hay que cruzar un puente colgante que pasa por encima de un río y luego subir una escalera con bastante pendiente, es por tanto una excursión no accesible para personas con dificultades de mobilidad. Por lo tanto, el viaje es una aventura en sí mismo. Un sitio similar pero más popular es la ciudad cueva de Khndzoresk, situada a 20 minutos en coche de Goris.

La ciudad también cuenta con varios monumentos conmemorativos dedicados a la Segunda Guerra Mundial en homenaje a los héroes de guerra. Además, se pueden degustar diferentes variedades de comida, probar la cerveza de barril de Goris y comprar en las pequeñas boutiques de los alrededores.

El famoso monasterio de Tatev, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, se encuentra también muy cerca de Goris. Y si aún queda tiempo, el complejo del monasterio del siglo IX, situado en lo alto de una meseta, también merece una visita.